jueves, 16 de enero de 2020

Jordi Cruyff asume un reto en la mitad del mundo


La impronta de los técnicos holandeses es conocida en el mundo del fútbol. Los Rinus Michels, Louis Van Gaal, Frank Rijkaard, Guus Hiddink o Leo Benhakker han dado de hablar en varias de los mejores equipos del mundo y por eso, no es de extrañar que un club o selección contrate a un entrenador surgido de los Países Bajos. En esta tónica, el apellido Cruyff tiene un espacio único, pues el mítico Johan revolucionó el fútbol como futbolista y estratega. Hoy, su hijo Jordi, es noticia: asume como director técnico de Ecuador en una cruzada extrema. Una prueba de fuego. ¿Sacará su estirpe europea para triunfar en Suramérica?



El reto de Jordi Cruyff es cuesta arriba. Llega a un continente desconocido para él en cuanto a trabajo se refiere, en el que tendrá que lograr resultados a corto plazo. Suramérica es la eliminatoria más difícil del mundo. Tiene todos los climas posibles, un calendario muy largo y nueve rivales que tienen futbolistas en la élite. No tendrá rival fácil. En Europa dirigir a una selección significa toparte con, por citar un ejemplo, a Inglaterra en una semana y a San Marino en la otra. En Suramérica el panorama es opuesto. Te puedes encontrar con Brasil de local y con la férrea Paraguay a la semana siguiente en los "Defensores del Chaco" bajo un clima opuesto al de la mitad del mundo.


Por otro lado, más allá de la rareza de un tulipán en la eliminatoria Suramericana, estamos ante un entrenador habituado a estar en la élite, al que no le temblará el pulso por tomar decisiones drásticas y al que el vestuario verá con respeto. En su etapa como futbolista, Cruyff jugó en el FC Barcelona y Manchester United, entre otros, y tuvo buenos partidos. Las recurrentes lesiones en su rodilla le impidieron llegar a un escalafón mayor, sin embargo, pocos dudas de ese talento que le llevó incluso a ser uno de los mejores jugadores de los Países Bajos en la Eurocopa 96. A nivel de clubes lo ganó todo y fuera de los terrenos se destacó en los despachos y como entrenador. Estas etapas le han llevado a Grecia, Israel y China. Es cierto que son ligas de poco renombre, pero sus números fueron buenos y por supuesto que ilusiona. En cuanto a su fútbol, es toda una incertidumbre, pero su apellido y sus raíces indican que nos encontraremos a una Ecuador con mucho vértigo y vocación ofensiva.


Un dato que no es menor es que Ecuador clasificó a sus tres Copas del Mundo con seleccionadores extranjeros, eso sí, todos colombianos. También un dato que puede jugar a favor de Cruyff es que normalmente, a excepción de las tres potencias (Argentina, Brasil y Uruguay), las selecciones suramericanas suelen clasificarse con estrategas foráneos. Así como en Ecuador llegaron a la Copa con colombianos, los "neogranadinos" recuperaron la alegría con Pekerman, un argentino, y los peruanos con Gareca, otro sureño. Si nos remontamos a 1994, Bolivia se clasificó con un español, Xavier Azkagorta, es decir, un europeo. Por esto, el pasaporte en sí, no debería ser un problema para el hispano holandés. Lo que sí tendrá que valorar Cruyff es el manejo del vestuario.

El reto de Jordi es grande. Estará en una eliminatoria en la que se deberá plantar estrategias ofensivas y defensivas, planteamientos tácticos distintos dependiendo los climas y en la que se encuentran varios de los mejores futbolistas del mundo. Pero tiene argumentos para hacer un buen trabajo. Ha aprendido de Cruyff y Ferguson, dos de los mejores, y ha triunfado a donde ha ido. En la mitad del mundo tendrá su gran oportunidad para demostrar su valía.

martes, 7 de enero de 2020

2019: el año en el que volvió el Fútbol Total


Los Países Bajos no olvidarán fácilmente 2019, probablemente uno de los mejores años en la historia del fútbol de ese país. Pudieron ser más los lauros, pero lo cierto es que en casi todos los torneos disputados, los tulipanes compitieron al mayor nivel y alcanzaron, como mínimo, las semifinales.

En la Champions League, el Ajax fue la sensación. Los "Ajacied" retomaron su identidad de la mano de Erik Ten Hag y saborearon la final. Para el recuerdo, los triunfos en condición de visitante al Real Madrid en el Bernabéu, a Juventus en Turín y a Tottenham en Wembley. Pese a no conseguir el pase a la final tras una trágica remontada de los "Spurs" el balance fue una maravilla y Europa se deslumbró con los De Jong, De Ligt y compañía.



A nivel de selecciones, Países Bajos protagonizó una resurrección envidiable. Tras quedarse a las puertas de las últimas dos grandes competiciones, la "Naranja Mecánica" derrotó 3-1 a Inglaterra en la Nations League y regresó a una final oficial en categoría absoluta tras nueve años de ausencia (en esa oportunidad perdió 1-0 vs España en el Mundial de Suráfrica). Falló 1-0 vs Portugal que jugaba de local, pero las ganancias estaban en el tapete. Había una identidad, el equipo recuperaba la sonrisa y el grupo se definía. Koeman encontraba la camino. De paso, la "Oranje" clasificó a la Eurocopa tras superar un grupo difícil y se quitó la paternidad de Alemania: le venció en Nations League (en 2018) y en condición de visitante en la fase de clasificación.



Aquí no quedaron las buenas noticias. La selección femenina absoluta alcanzó la final de la Copa del Mundo, donde cedió contra USA 2-0, y en categorías inferiores Países Bajos marcó la tónica al salir campeón del europeo Sub17 y al quedarse a las puertas de la final del Mundial de la categoría tras una increíble tanda de penales en semifinales contra México en un duelo en el que mereció más.



El fútbol holandés recuerda 1988 como su año ideal, pero este 2019 no pasará desapercibido. Aparecieron futbolistas de élite en el camino, una identidad, se obtuvo subcampeonatos absolutos en torneos FIFA/UEFA y en categorías inferiores se consiguió un título continental y una semifinal de Copa Mundial. Sólo falta capitalizar este regreso a la élite en un venidero 2020 cargado de fútbol y de nuevos retos.